Software CRM y redes sociales, dos aliados para innovar en tiempo de cambios
El año 2012 se presenta como un año de crecimiento profesional y personal, impulsado principalmente por la situación económica de inestabilidad que reina en España y en el resto de Europa.
“Las grandes ideas nacen de la crisis”. Esta afirmación no es una frase hecha, es la consecuencia natural que se da en algunos miembros de la especie humana al someterse a la limitación de recursos y al aumento de sus necesidades en distintos ámbitos. En un sentido más práctico, las “grandes ideas” son el resultado de: escuchar, enriquecer y optimizar; profundizando en los temas claves de un problema en concreto y dedicando muchas horas de trabajo.
Empresas y empleados de todos los sectores, nos enfrentamos a un futuro con mucha incertidumbre, pero también con excelentes posibilidades para destacar. Habrá que echar mano del ingenio, la creatividad y del coraje para que con cada paso, cada una de nuestras acciones, contribuya al beneficio individual y al colectivo. Será necesaria una mayor implicación en todos los ámbitos y menos indiferencia en todos aquellos grupos en los que participamos.
Este año que comenzamos representa una página en blanco, para que cada uno de los profesionales de todos los campos se apliquen en la consecución de sus logros. Tendremos que hacerlo con menos recursos y mayores presiones. Sin embargo, a pesar de la realidad externa, el proceso comienza con una decisión (¿convicción?) personal: afrontar el reto como una oportunidad. Será indispensable pensar de manera diferente y escuchar con atención las tendencias y los cambios en nuestro entorno. Como empresas, deberemos abrir los ojos ante competidores de todos los tamaños y también, las puertas a otras organizaciones que tradicionalmente no compartían nuestro mercado. Miraremos con atención a quienes están consiguiendo el éxito, y aprenderemos de quienes se enfrentan al fracaso.
Desde el punto de vista de la tecnología, que es mi campo de trabajo, y hablando específicamente de CRM y de redes sociales, considero que ambos recursos, por sus características de adaptabilidad, son elementos ideales a considerar en muchas situaciones empresariales. Las redes sociales nos permitirán “escuchar” y CRM nos permitirá reorganizar nuestros procesos internos y habilitar novedosos canales de comunicación. Ambos medios son fundamentales para difundir información y reorganizar los equipos de trabajo.
Siempre me ha atraído la flexibilidad de la tecnología CRM; su capacidad para adaptarse a las necesidades de los usuarios y de las organizaciones (incluidos cliente, seguidores y colaboradores). A diferencia de otros sistemas de información, con usos específicos y acotados por sus funcionalidades operativas muy concretas (ERP, BI, OAS, SE…), CRM nace como una tecnología aliada al cambio.
Era habitual, cuando estábamos inmersos en la implantación de proyectos CRM, dedicar muchos recursos para gestionar “la resistencia al cambio”. Será interesante ver el nuevo enfoque y la aceptación que las empresas darán a la tecnología CRM y a las redes sociales, ahora que tienen la necesidad de cambiar y ”resistirse” no parece una opción muy recomendable.